SALSA DOMINICANA

Durante muchos años los grupos merengueros de una generación u otra de alguna manera han incursionado en el mundo de la Guaracha y luego la Salsa.

Desde Johnny Ventura, “La Coquetona”, Félix del Rosario, Rafael Solano, Cuco Valoy, El Sonido Original, Los Kenton, Bonny Cepeda, Wilfrido, Los Hijos del Rey con su “Puchula” y otros grupos más recientes.

La gran pregunta, ¿Por qué no habían logrado penetrar al gusto popular y cruzar alguna que otra frontera?, creo que por que todavía no se había logrado separar la manera de cantar la salsa y el merengue, también por el poco apoyo radial, televisivo, prensa escrita, y la real independencia en cuanto a los cantantes para tomar la decisión de abrazar de manera definitiva este género tan popular en toda Latino-América.

Países como Venezuela y Colombia lograron sentar precedentes con un nuevo color a la salsa, Grupo Niche tenía un sonido inimitable, Los Adolescente también, logrando entrar al mundo internacional de la Salsa con sus propios estilos y colores.

Creemos que ha llegado el momento para nuestro país pueda tener su propio color y estilo. Si bien hemos tenido excelentes salseros como José Alberto, Rey Reyes, Raulin, todos tienen el sello de la salsa de Nueva York, arreglada y grabada por músicos puertorriqueños establecidos en la Urbe de la Salsa.

Sin restarle méritos a otros arreglistas como Joan Minaya, Ramón Orlando, Sonny Ovalles, es en las manos de Víctor Wail donde ha caído esta responsabilidad, es su forma de orquestar, sus ideas frescas y el estilo independiente de cada uno de los intérpretes nuestros, Michael, Sex Appeals, Asdrúbal, y otros jóvenes recientemente han protagonizado una verdadera guerra de talentosos cantantes que van creciendo en sus maneras de ser aceptados.

Todavía estamos en pañales en cuanto a la forma de interpretarla, en todas las sesiones de trabajo, sin quitarle mérito al trabajo que se ha hecho. Es conocido de todos que abrazar un género y sonar auténtico es un trabajo de mucho tiempo y luego darle el toque regional mucho mas lo cual es el gran logro que se busca.

Creo que la falta de un merengue novedoso, fresco, existía un vacío que ha sido llenado en todos sus aspectos por ese movimiento de exponentes, algunos ya habían trabajado bastante otros puros novicios, tratando de establecerse de manera definitiva.

Esto también podría servir de celos a los merengueros y entender que deben renovarse, videos de calidad, grabaciones diferentes, no podemos seguirle brindado al público lo mismo de veinte años.
No todos están preparados para asumir esos grandes cambios, no significa esto que vayan a grabar estilos que al final los hagan lucir mal, no todos por el hecho de ser cantantes tengan el sentir apropiado para incursionar en la salsa.

Son muchos ingredientes que logran ser protagonistas del éxito como nuevos exponentes de un género que estamos tratando de hacerlo nuestro.

Se necesita mucha inversión en todos los aspectos y asesoramientos más profesionales. Ya la palabra pegarse en la comunidad dejó de ser lo apetecible para el mercado, lo que se debe buscar ahora es como trascender, lo cual implica un proceso de mecanismos y que deban recordar que fuera del terreno nuestro hay un sinnúmero de extraordinarios intérpretes de Salsa con gran autoridad y profesionalismo.

Debemos asumir este gran reto con profesionalidad y seriedad, pues se pretende entrar a competir en grandes mercados con los grandes de ese género tan codiciado. Todavía en cuanto a lo interpretativo hay que trabajarlo mucho, es desligarnos del sentir que nos produce nuestra música y aprender a sentir y cantar de manera independiente.